Cronicas Chaqueñas

El senador nacional Samuel Cabanchik, 1 de los 2 senadores por la capital federal de la Coalición Cívica, decidió romper con el bloque que integra desde su fundación en 2007, explicando que lo hizo por el "excesivo personalismo" que le atribuyó a Elisa Carrió.

"La Coalición Cívica es un espacio que se creó como un punto de partida para afianzar un nuevo modo de hacer política. Hoy, casi 2 años después, absolutamente desdibujada”, fundamentó Cabanchik.

Tranquilo por la decisión tomada, él dijo: "Hace un año y medio insisto en la necesidad de abrir espacios de democratización interna y, hasta hoy, no se ha avanzado absolutamente nada", lanzó.

Cabanchik todavía guarda cierto enojo porque no se lo escuchó cuando propuso que Elisa Carrió debía encabezar la lista de diputados. La necedad de Llilita, puso en riesgo toda la negociación

Aunque se encargó de dejar claro que valora "la epopeya" que encabezó Carrió en 2007 -cuando decidió conformar la Coalición Cívica y aún hace pocos meses cuando se puso al frente del Acuerdo Cívico y Social-, fue muy crítico de la diputada electa.

"Carrió tuvo la grandeza, la capacidad de entrega y la lucidez de haber conformado este espacio pero no supo acompañar ese ímpetu con prácticas que estén a la altura de ese esfuerzo inicial", completó.


Cabanchik no ocultó su desazón frente a la falta de cohesión interna, los débiles mecanismos democráticos de participación y el escaso grado de institucionalización que ha alcanzado la Coalición Cívica, a consecuencia de lo cual en las últimas elecciones, en la Ciudad de Buenos Aires.

Para Cabanchik, el más grave de los males que, él lo aseguró, aquejan a la Coalición Cívica, es "la pérdida de identidad".

El senador integrará un bloque unipersonal que ya bautizó como Proyecto Buenos Aires Federal, que será parte del Acuerdo Cívico y Social.

Aquí el contenido de la carta

Queridas/os amigas/os:

Juntos hemos andado este camino que nos ha llevado al desafío de construir una nueva opción en la política argentina. Con muchos de Uds. comenzamos a hacerlo desde el Instituto Hannah Arendt y con muchos más desde la Coalición Cívica. A ambos espacios me sumé respondiendo positivamente a la convocatoria que conjuntamente me hicieran mi amiga y colega Diana Maffia y Elisa Carrió.

A más de cuatro años de ese comienzo hemos crecido significativamente y muchos de Uds. me honraron con su voto para desempeñar el cargo de Senador Nacional en las elecciones de 2007, lo que agradezco desde mi renovado compromiso de seguir trabajando juntos. Difícilmente hubiéramos podido iniciar este espacio que nos reúne en un mismo afán, sin la iniciativa, la honestidad y la lucidez de Elisa Carrió, a quien el pueblo argentino en su conjunto siempre le reconocerá que haya abierto una nueva opción en la política argentina, una nueva esperanza.

Sin embargo, no puedo dejar de compartir con Uds. mi desazón frente a la falta de cohesión interna, los débiles mecanismos democráticos de participación y el escaso grado de institucionalización que ha alcanzado la Coalición Cívica, a consecuencia de lo cual en las últimas elecciones, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, hemos perdido el apoyo de muchas/os conciudadanas/os.

A dos años y medio desde su fundación, la Coalición Cívica no ha logrado constituirse hacia adentro en la misma medida que, hacia afuera, ha contribuido a hacer y consolidar un nuevo espacio, el del Acuerdo Cívico y Social. Este último es un logro que debemos cuidar y ayudar a hacer consistente desde la participación democrática, la cohesión interna y la institucionalidad a fin de no repetir la historia y para que se convierta en un sólido instrumento político transformador de nuestra realidad.

En función de estas consideraciones y de mi renovado compromiso con nuestro trabajo común, los invito a que me sigan acompañando en mi gestión en el Senado de la Nación, desde un espacio nuevo que permita la participación democrática y la construcción realmente colectiva de una alternativa que logre al fin hacer realidad nuestros sueños de un país mejor para todas/os.

Samuel Manuel Cabanchik

El mandatario provincial, Jorge Capitanich, afirmó que mantuvo una conversación telefónica con el ex presidente Eduardo Duhalde, a pocas horas de que el ex gobernador bonaerense lanzara un mensaje de llamado de conciliación y diálogo al kirchnerismo.

"He hablado personalmente por teléfono con él y creo que sus palabras fueron prudentes en el sentido de que es necesario construir una Argentina basada en el diálogo", afirmó Capitanich quien destacó, sin embargo, que "este Gobierno no es autista, está con los oídos abiertos y tiene iniciativa política".

Según el gobernador, el llamado de Eduardo Duhalde tuvo como objeto "felicitarlo por su triunfo electoral".

Con respecto a la situación del Partido Justicialista (PJ), Capitanich destacó que "nunca dijo que la presidente Cristina Kirchner asumiera formalmente" la titularidad del bloque pero sí "sea vista como la conductora estratégica".

"Me parece que debe ser así porque el PJ es el partido del Gobierno y debe respaldar y garantizar la gobernabilidad", agregó y descartó una posible presidencia del partido por parte de Eduardo Duhalde. "No creo que ese sea su rol", señaló.

El nuevo Gabinete
A pocos minutos de asistir al acto de asunción de los nuevos ministros, Capitanich rechazó las versiones que indican que le fue ofrecido el puesto de Jefe de Gabinete, el cual ahora ocupará Aníbal Fernández. "Estas son cuestiones privativas de la Presidente, de las cuales no teníamos conocimiento, por lo que también descartó una posible oferta para ser parte del cuerpo de ministros".

Capitanich analizó que las designaciones son "positivas" y que cada postulación “tiene un por qué específico”. "Aníbal Fernández es un hombre trabajador, de muy buena formación intelectual para ejercer liderazgo y con mucha experiencia de gestión, lo ha demostrado en su paso como ministro".

La asignación de Amado Boudou a la cartera de Economía también la calificó como satisfactoria "por su sólida formación económica" y por "su idoneidad necesaria para enfrentar los desafíos".

La estropeada democracia de Honduras no necesita de Cristina Kirchner. La comunidad internacional (las Naciones Unidas, la OEA y la Unión Europea, entre otros) está trabajando para encontrar una solución en la increíble Tegucigalpa. Ningún otro golpe de Estado, salvo los frecuentes en Africa, provocó semejante reacción internacional en las últimas tres décadas.
La solución no es fácil. El presidente constitucional de Honduras, Manuel Zelaya, y el ejército de su país venían compitiendo por quién violaba mejor la Constitución. El Parlamento y la Justicia zanjaron la disputa y respaldaron a los militares para que tumbaran a Zelaya.
Zelaya, un sorpresivo aliado de Hugo Chávez que había asumido prometiendo todo lo contrario, pudo haber sido destituido mediante un juicio político. La relación de fuerzas, según se sabe ahora, era muy desfavorable al presidente derrocado. Sólo faltaron en Honduras un sistema político más sofisticado y una dirigencia enterada de que vivimos en el siglo XXI. En Tegucigalpa no hubo interés por la ley ni notificación de la modernidad.
En ese contexto, la presidenta argentina voló a Washington para resguardar con su cuerpo, pareció decir, la democracia hondureña.
Los presidentes serios de América latina dejaron la administración del conflicto en manos de las instituciones internacionales. Michelle Bachelet retiró el embajador chileno en Tegucigalpa y confió en la OEA. Lula le proporcionó al inteligente y eficaz secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, un imprescindible avión para que pudiera desplazarse entre Washington y el Caribe. El mexicano Felipe Calderón, el colombiano Alvaro Uribe y el uruguayo Tabaré Vázquez manifestaron su claro rechazo al método que se usó para deponer a Zelaya, pero confiaron en Insulza y en sus consejos, que privilegiaban la gestión diplomática ante posiciones irreconciliables.

Cristina Kirchner es quizás, entre todo ellos, la que gobierna entre mayores dificultades. Acaba de perder en su país unas elecciones cruciales que marcarán fatalmente la segunda mitad de su mandato. Ella y su esposo fueron derrotados en seis de los siete principales distritos argentinos, que congregan al 75 por ciento del electorado nacional. Según la afirmación escasamente rigurosa del nuevo ministro de Salud, Juan Manzur, la Argentina se habría convertido en el país más afectado en el mundo por la gripe A. Pero todos los países tienen casos probables que son infinitamente mayores que los casos comprobados.
Quizá Manzur haya recurrido a su arte de mago de las estadísticas que ya aplicó en Tucumán con la mortalidad infantil. Si los casos de gripe A son aquí 100.000, entonces el porcentaje de muertos argentinos es muy bajo. Tal vez. Nadie sabe nada, porque lo que ya está probado es que la Argentina carece de sistema sanitario, de estrategia y de estadísticas fiables.
Informes de economistas privados aseguran que el PBI argentino se derrumbó alrededor del 7 por ciento en los últimos cuatro trimestres y que la caída promedio de la actividad económica de 2009 sería de más del 5 por ciento. Esos pronósticos no tuvieron en cuenta las consecuencias económicas de la gripe A, que son devastadoras por sí mismas. Gobernadores y legisladores peronistas y opositores no peronistas le están pidiendo a Cristina Kirchner, desde la madrugada del lunes último, que modifique significativamente su gabinete y que cambie las políticas que impulsó hasta ahora.
Como en Colombia
Pero la Presidenta se fue a Washington y ahora anda por El Salvador. Zelaya no pudo entrar en Honduras y todo indica que el operativo de Cristina se parecerá demasiado al de su marido, cuando éste se internó con Chávez en la selva de Colombia para liberar a un niño que no estaba secuestrado. Los únicos compañeros de hazaña de la presidenta argentina (el ecuatoriano Rafael Correa y el paraguayo Fernando Lugo) expresan también una ideología determinada, mezcla de populismo y de autoritarismo, una ensalada de viejos estatismos y de nuevos dogmatismos.
¿Dónde está la Presidenta? ¿Dónde está su gobierno? Los argentinos terminarán por hacerse esas preguntas si Cristina Kirchner sigue corriendo hacia donde no la necesitan. Nada es más demostrativo de la influencia de las ideologías en el matrimonio presidencial que las fotos de anteayer: Cristina se peleaba con el gobierno de facto de Honduras desde Washington, y su esposo se empalagaba aquí entre los halagos de los intelectuales paraoficialistas de Carta Abierta. Un país aguardaba vanamente, mientras tanto, que los dos remontaran la derrota, que dejaran las ideas de lado y se dedicaran a las cosas.

URLICH: DESPUES DEL DESPILFARRO,
EL GOBIERNO PREPARA EL AJUSTE
Mientra el gobernador Capitanich abandona la provincia y se instala en Buenos Aires para operar en la interna peronista, la provincia sofre la profundización de la crisis y la recesión, después del descomunal despilfarro electoral. Como reconoció el propio ministro de Economía, se prepara un ajuste salvaje sobre la espalda del pueblo, sostiene el Diputado Nacional Carlos Urlich.
El Legislador Nacional aliancista, expresó hoy que los principales Medios de Comunicación de la provincia dan cuenta que el Gobierno prepara un severo ajuste de las cuentas públicas provinciales. Se anuncian recortes de pagos a proveedores, eliminación de contratos y becas, entre otras medidas, que lamentablemente recaeran en los sectores más desprotegidos de la provincia, aquellos a quienes se usó de rehén en las recientes elecciones, comprando su voluntad con becas y contratos basura que ahora dará por caídos, como efecto del obsceno despilfarro electoral de Capitanich y sus socios. La gente se pregunta por qué el gobierno no anticipó esta realidad durante la reciente campaña electoral.


Lejos del caos que vive a provincia, sin embargo, el Gobernador se instala en Buenos Aires, algunos dicen que por varios meses, para operar sobre la revuelta interna peronista y toma distancia de los problemas sociales que acarrea su política cleintelista y de gestión poco clara, dice Urlich, al tiempo que criticó que Capitanich siga siendo el más cercano operador del matrimonio presidencial, y deje la provincia librada a su suerte para privilegiar los intereses del matrimonio presidencial. Parece que ni uno ni otro escuchó el mensaje de las urnas el pasado 28 de junio.

Fin de Fiesta

En un lamentable fin de fiesta, sostiene el diputado , el Gobierno del Chaco enfrenta hoy, sin reflejos ni recursos, la virtual cesación de pagos a jubilados, proveedores, empleados públicos, contratados, becarios, etc. Lo que es peor, sus funcionarios ya no esconden lo que ocultaron en campaña: que el més próximo será aún peor. El próximo mes no se sabrá cuándo cobran ni siquiera los jubilados, los "becarios" que metieron por cuestiones electorales quedarán en la calle y lo mismo los contratados, en una total falta de respeto a la dignidad humana.

El caos que el Vicegobernador de la provincia dice querer frenar con la judicialización y la represión de los movimientos sociales, seguramente se agravará. Y la única responsabilidad es de este gobierno, que ha dilapidado fondos públicos en una campaña electoral desvergonzada, donde no se escatimó ni el pan ni el circo, los contratos basuras, la contratación de artistas en dólares, las fiestas, las becas y las promesas, la publicidad de saturación y engañosa con fondos del gobierno, todo en pos de la intentona de Capitanich por hacerse de una mayoría legislativa que la ciudadanía le dijo que no tendrá, para que no pueda hacer a su antojo las políticas más ambiciosas de su proyecto personal: la armonización del INSSSEP y la privatización de Secheep y Sameep, luego de fundirlas y rematarlas a precio vil, dijo el Diputado Urlich.

Banco en crisis y negocios poco claros

En este orden de cosas el Presidente del Nuevo Banco del Chaco, el abogado penalista Saife, sale hoy a decir que no se ocupa de las denuncias, pedidos de informes ni advertencias de este Legislador Nacional. A tanta arrogancia le digo que, en realidad, ya lo hizo cuando mandó al Directorio a tratar de explicar porqué están negociando las carteras de préstamos con entidades privadas o cuando tuvo que renunciarlo a Carlos de los Santos, muy a su pesar, debido a nuestras denuncias, aún cuando la línea política bajada por el gobernador era negar la situación de descalabro del Banco, expresó Urlich.

Hasta ahora, no quieren, no saben o no pueden explicar el porqué de los créditos de decenas de millones a empresas de fuera del Chaco, como la Brasilera "Tigre", que no puso ni siquiera una oficina en la provincia pero ya disfruta de los millones que salieron de bolsillos chaqueños Tampoco dicen cuál es la razón y el beneficio para el pueblo por haberle prestado 12 millones de pesos al diario porteño Ambito Financiero, ni mucho menos muestran el ultra secreto acuerdo entre Capitanich y el Grupo del Compañero Macri por Aerochaco, por el cual los aviones siguen volando casi vacíos, mientras nosotros pagamos la diferencia entre vacío y lleno. Tampoco se sabe en qué consiste realmente el acuerdo entre Capitanich y Macri para transportar a Boca JUniors. ¿Acaso es la punta del iceberg de las alianzas electorales de 2011?

Demasiadas dudas

El Gobierno del Chaco avanza a los tumbos, sin claridad y sin rumbo, con un gobernador ausente y todo el resto a la espera de una solución y del cumplimiento de las promesas electorales del 2007 y 2009. Con negocios poco claros, con empresas públicas en camino de fundirse por el despilfarro y nuestro Banco en situación cuasi Terminal, por la irresponsabilidad de un gobierno que, tras haber dilapidado el erario público en una campaña electoral desmedida, termina preparando un ajuste tremendo sobre la espalda del pueblo trabajador, sostiene el Diputado Radical.

Nuevamente pedimos al Gobernador que se haga cargo de la situación, que tome el toro por las astas, que no huya ni se esconda en Buenos Aires y en lugar de convocar a los compañeros en Buenos Aires, que convoque a las fuerzas políticas y sociales de la provincia al diálogo. Y que no sea simplemente para seguir con la anuncitis, sino para consensuar y diseñar las políticas de Estado que saquen a la provincia de la situación en la que se el mismo la puso. El pueblo votó por el diálogo y el consenso y es responsabilidad del gobierno cumplir ese mandato, finalizo Urlich.