Simple, porque van tres oportunidades en que el gobernador y el ministro de Economía le echan la culpa a “errores operativos” o “técnicos”en ambos organismos, para que no se puedan pagar los sueldos en término, cuando la única verdad es que el gobierno viene contando las monedas desde hace tres meses para poder afrontar los pagos al sector público.
Para poder pasar la época electoral, el gobierno tomó primero más de
375 millones de pesos prestados del ANSES.
Vendió la cartera de préstamos a un banco privado (Gracias esta decisión
por decreto del gobernador, los créditos y anticipos que sacaron los empleados
públicos y jubilado, deberán ser devueltos con un 80% más de interés).
Vació las cuentas de los programas nacionales de Salud y Desarrollo Social para
los más humildes, que tienen asignación específica y debieran ser intangibles.
Dispuso de la totalidad de todos los fondos del Poder Judicial (ocasionando
un grave conflicto de Poderes que no salió a la luz pública).
Terminó echando mano de las cuentas del INSSSEP para sus Prestadores,
provocando otro escándalo que todavía permanece de bajo perfil.
NO HUBIERON JAMÁS PROBLEMAS CON LAS LIQUIDACIONES
DE SUELDOS.
EL GOBIERNO NO DISPONE DE LIQUIDEZ.
LA PROVINCIA YA ACARREA UN DÉFICIT PRIMARIO DE MÁS
DE $ 450.000.000.
QUE CARA NOS SALIÓ LA CAMPAÑA ELECTORAL DE CAPITANICH!
(No espere escuchar, leer ni ver esta información en Diario Norte, Canal 9
ni la Radio de Julito Wajcman, los únicos que cobran puntualmente
todos los meses).
