Publicado por Angau NoticiasRozas, desde la presidencia de la UCR, pide más fuerza opositora a los legisladores y dirigentes radicales. ¿Usted nota que eso sea así?
-Yo no hablo de eso, no me interesa. Es un problema de ellos, que tienen un desafío enorme. Yo ya me fui de ese partido para no ser cómplice.
-De todos modos, hay gente desde el radicalismo que sigue abogando a favor de gestionar su regreso.
-Nunca vamos a hacer una alianza ni con el Partido Radical ni con el Partido Justicialista, porque nosotros creemos en una tercera posibilidad cultural. Vamos a pelear por ella y estamos dispuestos a bancarnos todas las derrotas que sean necesarias, todos los precios y todas las cooptaciones. Sino, no tendría sentido hacer política. No nos importa perder muchas veces, no estamos obsesionados por ver quién ocupa el mejor lugar o quién es alternativa de gobierno o si tenemos diez diputados más o diez menos. A mí me bastó con ser una voz, y en un momento fui yo contra 240. Nosotros adscribimos a una filosofía de la conciencia, muy profunda.
(Reportaje a Elisa Carrió del 21 de febrero de 2004)
-¿Qué le parece la lucha de los indios del Chaco?
-Es una reivindicación legítima. La verdad es que todos los pueblos indígenas del país están en condiciones tremendas, pero ningunos como los wichís, y no sólo los wichís chaqueños, sino en Salta, en todo el norte.
-¿Hay presiones para frenar a Alicia Terada en el Chaco?
-Sí, va a ser difícil, pero lo está haciendo ella maravillosamente. Lo importante es que la sociedad civil acompañe. El Chaco se merece que emerja una tercera fuerza plural, democrática, republicana, que rompa la corporación política y solucione los problemas de pobreza. Me pareció maravilloso el otro día, cuando una descendiente de japoneses como ella estaba en una mesa con aborígenes. Es muy fuerte, esto somos en el Chaco, esa riqueza profunda de muchos hijos de inmigrantes, más hijos de aborígenes, que podemos dar cuenta de un Chaco distinto.
-¿Al Chaco le va a salir más del atraso político y social que al país?
-Es paradójico, pero si la nación cambia, el Chaco puede cambiar muy rápido, con una política correcta de distribución del ingreso y de produccción. Puede cambiar muy rápido porque está en el piso. Creo que todo el norte puede cambiar más rápidamente que lo que uno imagina.
-¿Qué opina de las denuncias sobre negociados con tierras fiscales en la provincia?
-Estoy al tanto permanentemente. Hace un año y medio que acompañamos toda esa investigación que se hizo. Ahora se sacó un informe que se va a poner en internet y que vamos a hacer público la semana que viene en Buenos Aires. La verdad que es un escándalo, pero yo ya lo había dicho en 2001, que venían por la tierra.
-Y vinieron.
-(Se ríe) Y vinieron. Y después me dicen que soy apocalíptica. Ahora, vinieron en todo el país, eh.
-¿Qué le pareció la negativa de la Alianza en la Legislatura a formar una comisión investigadora?
-Es lógico, tienen que garantizar impunidad, ellos son los autores.
(Reportaje a Elisa Carrió del 20 de mayo de 2006)
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-Por lo que decía sobre quienes son cooptados por el kirchnerismo, ¿podría deducrise que el radicalismo del Chaco es un sector que resiste, entonces, por no haberse sumado a ese esquema, como sí lo hicieron otros distritos con gobernadores radicales?
-Se resiste por conducta, y para eso hay que tener conducta en los dos lugares.
-¿Le parece entonces que se dice una cosa a nivel nacional y se hace otra en el orden provincial?
-Es que lo que se dice en el orden nacional es incompatible con el manejo provincial. Kirchner es en la nación lo que Rozas fue en la provincia. Por eso también, que quede muy claro que nosotros no vamos a hacer ningún tipo de alianza con el radicalismo del Chaco.
(Reportaje a Elisa Carrió del 20 de mayo de 2006)
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Estos tres fragmentos precedentes corresponden a dos entrevistas que realizara a Elisa Carrió en las fechas indicadas. Para quien desee encontrar las reproducciones en papel, tendrá que buscar las ediciones de diario Norte de los días siguientes inmediatos.
Casi todas las veces que me tocó reportear a “Lilita”, opté por editar el diálogo en el esquema de pregunta-respuesta, para ser lo más fiel posible a sus palabras y a la cronología y climas de la conversación. Hoy, con todo lo ocurrido en las últimas dos semanas, viene bien repasar cada coma de aquellas expresiones que confirman, una vez más, que muy pocas figuras resisten un archivo. Y que Carrió no está entre ellas.
Leyendo las citas efectuadas al comienzo, no hace falta explicar demasiado, pero permítaseme ser redundante con estas preguntas:.
Si Kirchner y Rozas son lo mismo, ¿de qué sirve combatir a Kirchner con Rozas?
Si se fue de la UCR “para no ser cómplice”, ¿ahora que volvió –aunque sea como “aliada”- qué vendría a ser?
Si el acuerdo con Rozas es un “precio” para vencer a Kirchner, ¿significa que el fin justifica los medios?
¿Dónde queda lo de “bancarse todas las derrotas que sean necesarias” para mantener viva la “tercera posibilidad cultural”?
Si en el escándalo de las ventas de tierras públicas la Alianza buscaba “garantizar la impunidad porque son los autores” y esos negociados jodieron a indios y criollos, ¿dónde queda el compromiso “de hierro” de “nunca ir contra los pobres”?
Y sí, uno ya no es tan boludo, sabe que no es necesario que alguien dé las respuestas, de tan a la vista que están.
Es verdad, también, que probablemente se esté castigando por esta flagrante incoherencia a Carrió y Alicia Terada más que a otros incoherentes presentes y pasados, de otros partidos. Separando la crítica interesada del PJ, cabreado por la posibilidad de que el acuerdo con el ARI mejore el caudal de votos de la Alianza, uno tiene sin embargo la impresión de que el electorado independiente está todavía más caliente con las dos figuras de la Coalición Cívica. Quizá porque las decepciones duelen más cuando llegan de quienes uno no las espera.
También podría ser por la increíble habilidad con la que el ARI incineró en una semana un plausible trabajo de cuatro años mostrándose distinto, suicidio a lo bonzo que ahora deja a una poblada franja de ciudadanos independientes sin saber qué carajo hacer con su sobre el 28 de junio. Quienes en 2005 y 2007 votaron por Terada, difícilmente vuelvan a hacerlo esta vez. Verla en la Peña Nativa Martín Fierro como una atracción más del parque jurásico rozista debe haber provocado un aumento abrupto de las ventas de Hepatalgina en las farmacias de la provincia.
En realidad, los golpes del súbito pragmatismo de Carrió y Terada son dos. Por un lado, como se dijo antes, eliminan una opción para el electorado independiente. Pero hay un efecto más.
En el régimen nazi alemán, había judíos que ocupaban roles diversos en la estructura del poder. Incluso los hubo en las administraciones de los campos de exterminio. No sucedía porque fuera falso el racismo criminal de Hitler y los suyos, sino para dar una impresión de tolerancia y amplitud que en ciertos círculos pretendía lavar la imagen del Tercer Reich. Terada, parada en ese escenario de la Peña, parecía ser “la honesta oficial” de la Alianza. Casi casi que los hombres del ex gobernador podrían ponerla en los afiches de la campaña en marcha, y debajo de su rostro escribir, simplemente: “¿Vieron que no éramos tan corruptos?”.
Como sea, no sirve de nada ser los viudos del ARI. Eso sería hacerle el juego al mierdoso bipartidismo chaqueño.
Hay que saber mirar, y tener ganas de encontrar. Seguro que habrá otros verdaderamente dispuestos a bancarse todas las derrotas que hagan falta, aunque no lo digan, aunque no profeticen nada, aunque no los invite Mirta a almorzar.
Gente que entiende, como decía entender aquella Carrió de 2004, que de otro modo no tiene sentido hacer política.
Sergio Schneider
